Génesis 35

1. Y Dios le dijo a Jacob, Levántate, sube a Betel y habita allí, y haz allí un altar para Dios quien se te apareció cuando huías de la vista de Esaú tu hermano.
2. Entonces Jacob -le- dijo a su casa y a todos los que -estaban- con él, Quitad los dioses extraños que -están- entre vosotros, y limpiaos y cambiad vuestras prendas.
3. Levantémonos y subamos a Betel, y haré allí un altar para Dios, quien me respondió en el día de mi angustia, y estuvo conmigo en el camino que tomé.
4. Y le dieron a Jacob todos los dioses extraños que -tenían- a mano, y -todos los- aretes que -tenían- en sus oidos, y Jacob los escondió debajo del roble al lado de Siquem.
5. Y viajaron, y el terror de Dios vino sobre las ciudades que los rodeaban, y no persiguieron a los hijos de Jacob.
6. + Entonces Jacob llegó a Luz, en Canaán, esto -es-, a Betel, él y toda su gente que estaba con él.
7. Y construyó allí un altar, y llamó el lugar El-Betel: pues allí Dios se le apareció, cuando huía del rostro de su hermano.
8. Pero Débora, la acompañante de Rebeca murió, y fue enterrada en Betel debajo de un roble, y el nombre de allí era Alón-bacut.
9. + Y Dios se le apareció a Jacob otra vez, al salir de Padan-aram, y lo bendijo.
10. Y Dios le dijo, Tu nombre no será ya más Jacob, sino que Israel será tu nombre, y llamó su nombre Israel.
11. Y Dios le dijo, Yo -soy el- Dios Todopoderoso: fructificad y multiplicaos; una nación y una compañía de naciones saldrán de ti, y reyes saldrán de tus lomos;
12. Y la tierra que le di a Abraham y a Isaac, a ti te la daré, y a tu simiente después de ti -también- la tierra le daré.
13. Y Dios ascendió de él en el lugar donde habló con él.
14. Y Jacob armó un pilar en el lugar donde habló con él, un pilar de piedra: y derramó allí una ofrenda para beber, y -también- derramó allí aceite.
15. + Y Jacob le colocó por nombre al lugar donde Dios habló con él, Betel.
16. Y viajaron desde Betel, sólo un pequeño trecho hasta llegar a Efrata: y Raquel estuvo de parto y tuvo una dura labor.
17. Y sucedió que cuando estaba en su ardua labor, la partera le dijo, No temas, tendrás también este hijo.
18. Y sucedió que mientras su alma partía (pues murió) que le colocó por nombre Benoni, pero su padre lo llamó Benjamín.
19. Y Raquel murió, y fue enterrada camino a Efrata, la cual -es- Belén.
20. Y Jacob armó un pilar sobre su sepulcro: ese -es- el pilar del sepulcro de Raquel hasta este día.
21. + E Israel viajó, y extendió su tienda más allá de la torre de Edar.
22. Y aconteció que cuando Israel habitaba en esa tierra, que Rubén fue y se acostó con Bilha, la concubina de su padre: e Israel oyó -de esto-. Ahora pues, los hijos de Jacob fueron doce:
23. Los hijos de Lea: Rubén, el primogénito de Jacob, Simeón, Leví, Judá, Isacar y Zebulún.
24. Los hijos de Raquel: José y Benjamín.
25. Y los hijos de Bilha, la criada de Raquel: Dan y Neftalí.
26. Y los hijos de Zilpa, la criada de Lea: Gad y Aser. Estos son los hijos de Jacob, que le nacieron en Padan-aram.
27. + Y Jacob vino hasta donde su padre en Mamre, a la ciudad de Arba, la cual es Hebrón, donde residieron Abraham e Isaac.
28. + Y los días de Isaac fueron ciento ochenta años.
29. E Isaac entregó el espíritu, y murió, y fue reunido a su gente, -estando- viejo y lleno de días, y sus hijos Esaú y Jacob lo enterraron.

Génesis 34

1. Y Dina la hija que Lea le dio a luz a Jacob, salió a ver a las hijas de la tierra.
2. Y cuando Siquem el hijo de Hamor el Heveo, príncipe del país, la vio, la tomó, se acostó con ella y la deshonró.
3. Y su alma se prendió a Dina la hija de Jacob, y amó a la doncella, y le habló amablemente a ella.
4. Y Siquem le habló a su padre Hamor diciendo, Dame esta doncella por esposa.
5. Y Jacob escuchó que él había deshonrado a Dina su hija; ahora pues sus hijos estaban con el ganado de él en el campo: y Jacob guardó silencio hasta cuando ellos llegaron.
6. + Y Hamor el padre de Siquem fue hasta donde Jacob para charlar con él.
7. Y los hijos de Jacob vinieron del campo cuando oyeron -de ello-, y los hombres estaban dolidos, y muy airados, por la locura que él había hecho en Israel acostándose con la hija de Jacob, cosa que no debía haberse hecho.
8. Y Hamor charló con ellos diciendo, El alma de mi hijo Siquem anhela vuestra hija: os ruego se la deis por esposa.
9. Y celebrad matrimonios con nosotros, dadnos -de- vuestras hijas, y de las nuestras tomad para vosotros.
10. Y habitaréis con nosotros, y la tierra se hallará delante vuestro; habitad y comerciad en ella, y adquirid posesiones en ella.
11. Y Siquem le dijo al padre y a los hermanos de ella, Dejadme hallar gracia ante vuestros ojos, y daré lo que me digáis.
12. Nunca -será- demasiado el regalo y la dote que me pidáis, y daré de acuerdo a lo que me digáis, pero -por favor- dadme la doncella por esposa.
13. Y los hijos de Jacob respondieron con engaño a Siquem y a Hamor, y dijeron, debido a que había deshonrado a Dina su hermana,
14. Y les dijeron, No podemos hacer esto, de dar nuestra hermana a alguien incircunciso, pues -sería- una humillación para nosotros.
15. Pero en esto consentiremos con vosotros: si sois como nosotros, que cada varón vuestro sea circuncidado.
16. Entonces os daremos de nuestras hijas, y tomaremos para nosotros de las vuestras, y habitaremos con vosotros, y nos volveremos un pueblo.
17. Pero si no nos escucháis para que seáis circuncidados, entonces tomaremos a nuestra hija y partiremos.
18. Y sus palabras complacieron a Hamor y a Siquem el hijo de Hamor.
19. Y el joven no demoró en hacerlo, pues se había deleitado en la hija de Jacob, y él -era- el más honorable de toda la casa de su padre.
20. + Y Hamor y Siquem su hijo llegaron al portón de su ciudad, y charlaron con los hombres de su ciudad, diciendo,
21. Estos hombres -son- apacibles con nosotros; dejémoslos entonces habitar en la tierra y comerciar acá, porque mirad, la tierra -es- suficiente para ellos; tomemos -de- sus hijas como esposas, y démosles de nuestras hijas.
22. Solamente en esto los hombres consentirán habitar con nosotros para que seamos un pueblo, si cada varón de entre nosotros se circuncida, como ellos -están- circuncidados.
23. ¿No -serán- sus ganados, su riqueza y toda bestia de ellos nuestros? Sólo consintámosles que habiten con nosotros.
24. Y escuchaba a Hamor y a su hijo todo el que salía del portón de su ciudad, y cada varón fue circuncidado, todo el que salía del portón de su ciudad.
25. + Y sucedió que al tercer día, cuando estaban adoloridos, dos de los hijos de Jacob, Simeón y Leví, hermanos de Dina, tomaron cada uno su espada, valientemente vinieron a la ciudad, y mataron a todos los varones.
26. Y mataron a Hamor y a Siquem su hijo a filo de espada, y sacaron a Dina de la casa de Siquem y se fueron.
27. Los hijos de Jacob llegaron a la ciudad, y despojaron la ciudad, por ellos haber deshonrado a su hermana.
28. Tomaron -de- sus ovejas, bueyes, asnos y -de- lo que había en la ciudad, y -de- lo que había en el campo,
29. Y -de- toda su riqueza, a sus pequeños y a sus esposas llevaron cautivos, y despojaron incluso todo lo que -había- en la casa.
30. Y Jacob -le- dijo a Simeón y a Leví, Me habéis atribulado haciéndome heder entre los habitantes de la tierra, entre los Cananeos y los Ferezeos: los míos no son numerosos, se congregarán contra mí y me matarán, y mi casa y yo seremos destruidos.
31. Y ellos -le- dijeron, ¿Va a tratar él a nuestra hermana como una ramera?

Génesis 33

1. Y Jacob alzó sus ojos, y miró, y he aquí que Esaú venía, y con él cuatrocientos hombres. Y él dividió los hijos entre Lea, Raquel, y las dos criadas.
2. Y puso a las criadas y a sus hijos primero, a Lea y a sus hijos después, y a Raquel y a José de últimos.
3. Y él los pasó, y se inclinó hasta el suelo siete veces, hasta acercarse a su hermano.
4. Y Esaú corrió a encontrarlo, lo abrazó, cayó sobre su cuello, lo besó, y lloraron.
5. Y él alzó sus ojos y vio las mujeres y los niños, y dijo, ¿Quiénes -están- contigo? Y él dijo, los hijos que Dios en su gracia le ha dado a tu siervo.
6. Entonces las criadas se acercaron, ellas y sus hijos y se inclinaron.
7. Y Lea también se acercó con sus hijos y se inclinaron, y después se acercaron José y Raquel, y se inclinaron.
8. Y él dijo, ¿Qué -hay- con todos estos rebaños que encontré? Y él dijo, Para hallar gracia ante tus ojos, Oh mi señor.
9. Y Esaú dijo, Tengo suficiente hermano mío. Guarda lo que tienes para ti.
10. Y Jacob dijo, No, te ruego que si he hallado gracia a tu vista, recibas entonces los presentes de mi mano, porque yo he visto tu rostro como si hubiera visto el rostro de Dios, ya que te complaciste conmigo.
11. Te ruego que tomes -de- mi bendición que para ti traje, porque Dios me ha tratado con gracia, y porque tengo suficiente. Y lo urgió, y -la- tomó.
12. Y él -le- dijo, Hagamos el viaje, vamos, e iré delante de ti.
13. Y él le dijo, Mi señor sabe que los niños -son- tiernos, y los rebaños y manadas con crías -están- conmigo, y si los hombres los van a exceder un día conduciéndolos, todo el rebaño morirá.
14. Que mi señor te ruego, pase delante de su siervo, y yo guiaré suavemente al ritmo del ganado que va delante mío y -que- los niños sean capaces de soportar, hasta cuando llegue a mi señor en Seir.
15. Y Esaú -le- dijo, Permíteme ahora dejar contigo de la gente que -está- conmigo. Y él -le- dijo, ¿-Para- qué se necesita? Déjame hallar gracia ante los ojos de mi señor -sin ello-.
16. + Entonces Esaú se devolvió ese día -y emprendió- camino a Seir.
17. Y Jacob viajó a Sucot, y se construyó una casa, e hizo enramadas para su ganado: por ello el nombre del lugar es Sucot.
18. + Y Jacob llegó a Salem, ciudad de Siquem, en la tierra de Canaán, cuando vino de Padanaram, y levantó su tienda frente a la ciudad.
19. + Y compró una parcela del campo donde había puesto su tienda, de mano de los hijos de Hamor, el padre de Siquem, por cien monedas.
20. Y erigió allí un altar, y lo llamó El-Elohe-Israel.

Génesis 32

1. Y Jacob continuó su camino, y los ángeles de Dios lo encontraron.
2. Y cuando Jacob los vio, dijo, Esta es la hueste de Dios: y llamó el nombre de ese lugar Mahanaim.
3. Y Jacob envió mensajeros delante de él a Esaú su hermano a la tierra de Seir, el país de Edom.
4. Y les mandó diciendo, Así hablaréis a mi señor Esaú, Tu siervo Jacob dice así, He residido con Labán, quedádome allí hasta ahora:
5. Y tengo bueyes, asnos, rebaños, criados y criadas, y he enviado para decirle a mi señor si puedo hallar gracia a tu vista.
6. + Y los mensajeros retornaron a Jacob, diciendo, Fuimos hasta -donde- tu hermano Esaú, y él también viene a encontrarse contigo, y cuatrocientos hombres con él.
7. Entonces Jacob tuvo muchísimo miedo y angustia, y dividió la gente que -estaba- con él, los rebaños las manadas y los camellos en dos bandas;
8. Y dijo, Si Esaú llega a una compañía y la hiere, entonces la compañía que quede se escapará.
9. + Y Jacob dijo, O Dios de mi padre Isaac, el SEÑOR que me dijo, Retorna a tu país y a tus parientes, y yo te trataré bien.
10. No soy digno de la más pequeña de todas tus misericordias, y de toda la verdad que has mostrado a tu sirviente; pues con mi cayado pasé este Jordán, y ahora me he dividido en dos bandas.
11. Líbrame, te ruego, de la mano de mi hermano, de la mano de Esaú, pues le temo, no sea que venga y me hiera a la madre con los hijos.
12. Y tú dijiste, Yo por cierto te haré bien, y haré a tu simiente como la arena del mar, que no se puede numerar de tan -gran- multitud.
13. + Y se alojó allí esa misma noche; y tomó de lo que había a mano presentes para Esaú su hermano.
14. Doscientas cabras, veinte cabros, doscientas ovejas y veinte carneros,
15. Treinta camellas que amamantan, cuarenta vacas, diez toros, veinte asnas y diez asnitos,
16. Y -los- entregó en las manos ďe sus criados, cada manada por separado, y le dijo a sus criados, Adelaos y dejad un espacio entre manada y manada.
17. Y encargó sobremanera, diciendo, Cuando Esaú mi hermano se encuentre contigo y te pregunte diciendo, ¿Quién -eres-? ¿Y a dónde vas? ¿Y de quién son los que -están- delante tuyo?
18. Entonces dirás, De tu siervo Jacob; son un presente enviado a mi señor Esaú: y he aquí que él viene detrás nuestro.
19. Y de esta manera le encargó al segundo y al tercero, y a todos los que seguían detrás de las manadas, diciendo, Así le hablaréis a Esaú cuando lo encontréis.
20. Y decid-le- además, He aquí que tu siervo Jacob -viene- detrás nuestro. Pues decía, Lo apaciguaré con el presente que va delante, y después veré su rostro, si por ventura me acepta.
21. Y así se fueron los presentes delante de él, y él mismo pernoctó esa noche en la compañía.
22. Y se levantó esa noche, tomó sus dos esposas con sus dos criadas, sus once hijos y pasó el vado de Jaboc.
23. Y los llevó y los envió -haciéndoles- cruzar el arroyo, y envió -todo- lo que tenía.
24. + Y Jacob se quedó solo, y allí un hombre contendió con él hasta asomar el día.
25. Y cuando él vio que no -podía- prevalecer contra él, -le- tocó el hueco de su muslo, y el hueco del muslo de Jacob se descoyuntó mientras contendía con él.
26. Y él -le- decía, Déjame ir, pues el día asoma. Y él le decía, A menos que me bendigas, no te dejaré ir.
27. Y él le dijo, ¿Cuál -es- tu nombre? Y él le dijo, Jacob.
28. Y él le dijo, Tu nombre no será más Jacob, sino Israel, pues como príncipe tienes poder sobre Dios y sobre los hombres, y haz prevalecido.
29. Y Jacob -le- preguntó diciendo, Di tu nombre te lo ruego. Y -le- dijo, ¿Para qué preguntas mi nombre? Y lo bendijo allí.
30. Y Jacob llamó el nombre del lugar Peniel: pues he visto a Dios cara a cara, y mi vida fué preservada.
31. Y mientras atravesaba Peniel el sol se levantó -alumbrándolo- a él, y cojeaba sobre su muslo.
32. Por eso los hijos de Israel no comen el tendón que se contrajo que está sobre el hueco del muslo hasta este día, porque él tocó el hueco del muslo de Jacob en el tendón que se contrajo.

Génesis 31

1. Y escuchaba las palabras de los hijos de Labán diciendo, Jacob se ha llevado todo lo de nuestro padre; y de lo de nuestro padre él ha obtenido toda su gloria.
2. Y Jacob observaba el rostro de Labán, y, he aquí que no -era- para con él como antes.
3. Y el SEÑOR -le- dijo a Jacob, Retorna a la tierra de tus padres, y a tu parentela; y yo estaré contigo.
4. Y Jacob envió por Raquel y Leah -que estaban- en el campo con su rebaño,
5. Y les dijo, Veo que el rostro de vuestro padre para conmigo ya no es como -lo era- antes; pero el Dios de mi padre ha estado conmigo.
6. Y vosotras sabéis que con todas mis fuerzas le he servido a vuestro padre.
7. Y vuestro padre me ha engañado, cambiándome el salario diez veces, pero Dios no le ha dejado hacerme daño.
8. Si él decía: Las pintadas serán tu salario, entonces todo el ganado daba a luz pintadas, y si él decía: las rayadas serán tu sueldo, entonces todo el ganado daba a luz rayadas.
9. Así Dios se llevó el ganado de vuestro padre, y -me lo- dio a mí.
10. Y sucedió que en el tiempo en que el ganado concebió, yo alcé mis ojos y vi en un sueño, y he aquí que los carneros que montaban al ganado -eran- rayados, pintados y negruzcos.
11. Y el ángel de Dios me habló en un sueño -diciéndome-, Jacob: y yo -le- dije, Aquí -estoy-.
12. Y me dijo, Levanta ahora tus ojos, y mira que todos los carneros que montan al ganado -son- rayados, pintados y negruzcos: porque he visto todo lo que Labán te hace.
13. Yo -soy- el Dios de Betel, donde ungiste el pilar, -y- donde me hiciste un voto: levántate ahora, vete de esta tierra, y retorna a la tierra de tu parentela.
14. Y Raquel y Lea respondieron y le dijeron, ¿-Queda- aún alguna porción o herencia para nosotras de la casa de nuestro padre?
15. ¿No somos contadas por él -como- extranjeras? Pues nos ha vendido, y además bastante se ha devorado nuestro dinero.
16. Porque todas las riquezas que Dios se ha tomado de nuestro padre, son nuestras y de nuestros hijos: ahora pues, lo que sea que Dios te haya dicho, hazlo.
17. + Entonces Jacob se levantó y organizó a sus hijos y a sus esposas en camellos;
18. Y se llevó todo su ganado, y todos los bienes que había conseguido, el ganado que adquirió en Padan-aram, para ir a donde Isaac su padre en la tierra de Canaán.
19. Y Labán salió a trasquilar a sus ovejas, y Raquel había robado las imágenes que -eran- de su padre.
20. Y Jacob se escabulló a espaldas de Labán el Sirio, pues no le dijo que huía.
21. Así que huyó con todo lo que tenía; y se levantó, y atravesó el rio, y se dirigió al monte Gilead.
22. Y al tercer día se le contó a Labán que Jacob había huido.
23. Y él tomó a sus hermanos con él, y lo persiguió en un viaje de siete días; y lo alcanzaron en el monte Gilead.
24. Y Dios vino hasta -donde- Labán el Sirio en un sueño de noche, y le dijo, Cuídate de no hablarle a Jacob cosa buena ni mala.
25. + Entonces Labán alcanzó a Jacob. Ahora pues, Jacob había levantado su tienda en el monte, y Labán con sus hermanos acampaban en el monte Gilead.
26. Y Labán -le- dijo a Jacob, ¿Qué hiciste, al haberte escabullido a escondidas mías, llevándote a mis hijas, como cautivas -tomadas- a espada?
27. ¿Por qué huiste en secreto escabulléndote de mi sin decírmelo, para -así- haberte despedido con alegría y con canciones, con pandereta y con arpa?
28. ¿Y no me dejaste besar a mis hijos y a mis hijas? Ahora pues has hecho neciamente al obrar -así-.
29. En mis manos está el hacerte daño, pero el Dios de tu padre me habló anoche diciendo, Ten cuidado de no hablarle a Jacob cosa buena ni mala.
30. Y ahora pues, -aunque- por cierto desees irte porque extrañas sobremanera la casa de tu padre, ¿porqué te has robado mis dioses?
31. Y Jacob respondió y -le- dijo a Labán, Porque temí y dije, Por ventura -vas a- querer coger de mi por la fuerza a tus hijas,
32. A quien le encuentres tus dioses, que no viva: delante de nuestros hermanos busca lo tuyo de entre lo mío, y llévatelo. Pues Jacob no sabía que Raquel los había robado.
33. Y Labán entró a la tienda de Jacob y a la de Lea, y a las tiendas de las dos criadas, pero no -las- encontró. Después de que salió de la tienda de Leah entró a la tienda de Raquel.
34. Ahora pues, Raquel había tomado las imágenes, y las había puesto en la silla del camello, sentándose sobre ellas. Y Labán buscó por toda la tienda pero no -las- encontró.
35. Y le dijo a su padre, No se disguste mi señor que no pueda levantarme en tu presencia, pues me llegó la costumbre de las mujeres. Y él buscó, pero no encontró las imágenes.
36. + Y Jacob se encolerizó y regañó a Labán, y respondió diciendo-le- a Labán, ¿Cuál es mi falta? ¿Cuál es mi pecado para que me hayas perseguido tan encarnecidamente?
37. Como ya buscaste entre todos mis enseres, ¿qué encontraste en todas mis pertenencias? Colócalas aquí delante de los hermanos tuyos y míos, para que puedan juzgarnos a los dos.
38. Estos veinte años -he estado- contigo; tus ovejas y cabras no han perdido sus crías, ni -tampoco- me he comido los carneros de tu rebaño.
39. Lo desgarrado -por las bestias- no te lo traía; yo me hacía cargo de lo que se perdía; de mis manos lo requerías, -ya fuera- que los robaran de día o de noche.
40. Así estaba yo: en el día la sequía me consumía, y en la noche la escarcha, y el sueño se me iba.
41. Por veinte años así estuve en tu casa; catorce años te serví por tus dos hijas, y seis años por tu ganado, y diez veces me has cambiado el salario.
42. Si no fuera porque el Dios de mi padre, el Dios de Abraham y el temor de Isaac no hubieran estado conmigo, por seguro que ahora me hubieras despedido -con las manos- vacías. Dios vio mi aflicción y la labor de mis manos, y -él mismo te- reprendió anoche.
43. + Y Labán respondió y -le- dijo a Jacob, -Estas- hijas -son- mis hijas, y estos hijos -son- mis hijos, y -este- rebaño -es- mi rebaño, y todo lo que ves es mío, y qué puedo hacerle hoy a estas mis hijas o a sus niños que ellas han dado a luz?
44. Ahora pues, por tanto ven y hagamos un convenio tú yo: y que se vuelva un testimonio, entre tú y yo.
45. Y Jacob tomó una piedra, y la colocó como pilar.
46. Y Jacob -le- dijo a sus hermanos, Reúnan piedras; y tomaron piedras e hicieron un montón, y comieron allí sobre el montón.
47. Y Labán lo llamó Jegar Sahaduta, pero Jacob lo llamó Galaad.
48. Y Labán dijo, Esta pila es un testigo entre tú y yo este día. Por tanto el nombre de ella fue Galaad.
Y Mizpa, porque dijo: El SEÑOR mira entre tú y yo, -aún- cuando estemos ausentes el uno del otro.
50. Si tu afliges a mis hijas, o si tomas esposas fuera de de mis hijas, no -hay- hombre con nosotros; -pero- mira que Dios -es- testigo entre tú y yo.
51. Y Labán -le- dijo a Jacob, He aquí este montón, y he aquí -este- pilar que he echado entre tú y yo.
52. Este montón -sea- testigo, y -este- pilar -sea- testigo de que yo no sobrepasaré este montón -dirigiéndome- a ti, -y- de que tú no sobrepasarás este montón y esta pila -dirigiéndote- hacia mí para hacerme daño.
53. El Dios de Abraham, y el Dios de Nacor, el Dios del padre de ellos juzgue entre nosotros. Y Jacob juró por el temor de su padre Isaac.
54. Entonces Jacob ofreció sacrificio en el monte, e invitó a sus hermanos a comer pan, y comieron pan, y tardaron toda la noche en el monte.
55. Y temprano en la mañana Labán se levantó, besó a sus hijos y a sus hijas y los bendijo; y Labán partió y a su lugar retornó.

Génesis 30

1. Y cuando Raquel vio que no le daba hijos a Jacob, envidió a su hermana, y le dijo a Jacob, Dame hijos, o si no me muero.
2. Y se encendió en ira Jacob contra Raquel, y -le- dijo, ¿Acaso -soy- Dios para retenerte el fruto del vientre?
3. Y ella -le- dijo, Mira a mi sirviente Bilha, entra en ella, y ella dará a luz en mi canto, para que yo pueda también tener hijos por -medio de- ella.
4. Y le dió a Bilha su criada por esposa, y Jacob entró en ella.
5. Y Bilha concibió, y le dió a luz a Jacob un hijo.
6. Y Raquel dijo, Dios me ha juzgado, y también ha escuchado mi voz, y me ha dado un hijo: por eso llamó su nombre Dan.
7. Y Bilha la sirviente de Raquel concibió de nuevo, y le dió a luz a Jacob un segundo hijo.
8. Y Raquel dijo, Con gran esfuerzo he contendido con mi hermana, y prevalecí, y llamó su nombre Neftalí.
9. Cuando Lea vio que había dejado de dar a luz, tomó a Zilpa su sirviente, y se la dio a Jacob como esposa.
10. Y Zilpa la sirviente de Leah le dio a luz un hijo a Jacob.
11. Y Leah dijo, Se acerca una tropa: y llamó su nombre Gad.
12. Y Zilpa, la sirviente de Leah le dió a luz un segundo hijo a Jacob.
13. Y Leah dijo, Estoy feliz porque las hijas me llamarán bendecida, y llamó su nombre Aser.
14. + Y Rubén salió en los días de la cosecha de trigo, y halló mandrágoras en el campo, y las trajo a su madre Lea. Entones Raquel -le- dijo a Lea, Te ruego que me des de las mandrágoras de tu hijo.
15. Y ella le dijo, ¿-Es acaso- asunto pequeño haber tomado tú a mi esposo? ¿Y quieres también quitarme las mandrágoras de mi hijo? Y Raquel -le- dijo, Por eso él se acostará contigo esta noche a cambio de las mandrágoras de tu hijo.
16. Y Jacob vino del campo al atardecer, y Lea fue a encontrarlo, y -le- dijo, Debes allegarte a mí, pues por cierto que te he pagado con las mandrágoras de mi hijo. Y él se acostó con ella esa noche.
17. Y Dios escuchó a Lea, y ella concibió, y le dio a luz a Jacob el quinto hijo.
18. Y Lea dijo, Dios me ha recompensado por haberle dado mi criada a mi esposo, y lo llamó Isacar.
19. Y Lea concibió de nuevo, y le dio a luz a Jacob el sexto hijo.
20. Y Lea dijo, Dios me ha colmado de una buena dote; Ahora mi esposo habitará conmigo, ya que le he dado seis hijos. Y llamó su nombre Zebulón.
21. Y después dio a luz una hija, y llamó su nombre Dina.
22. + Y Dios se acordó de Raquel, la escuchó y abrió su vientre.
23. Y ella concibió, y dio a luz un hijo, y dijo, Dios se llevó mi humillación:
24. Y llamó su nombre José, y dijo, El SEÑOR me añadirá otro hijo.
25. + Y aconteció que cuando Raquel había dado a luz a José, Jacob le dijo a Labán, Despídeme, para poderme ir a mi propio lugar y a mi país.
26. Dame mis esposas y mis hijos, por quienes te he servido, y déjame ir: pues conoces el servicio que te he hecho.
27. Y Labán le dijo, te ruego -que te demores- si he hallado favor a tus ojos, pues he aprendido por experiencia que el SEÑOR me ha bendecido por causa tuya.
28. Y le dijo, señálame tu salario, y -te lo- daré.
29. Y él le dijo, Tú sabes cuánto te he servido, y cómo estuvo conmigo tu ganado.
30. Porque -era- poco lo que tenías antes de -que- yo -llegara-, y -ahora- se ha incrementado hasta -volverse- una multitud; y el SEÑOR te ha bendecido desde mi venida: ¿y ahora cuándo proveeré también para mi propia casa?
31. Y él -le- dijo, ¿Qué -puedo- darte? Y Jacob -le- dijo, No me des nada, si conmigo haces lo siguiente, Voy a alimentar y a cuidar tus rebaños de nuevo:
32. Pasaré hoy por todos tus rebaños, removiendo de ellos todo el ganado pintado y con manchas, y todo el ganado café de entre las ovejas, y las manchadas y pintadas de entre las cabras; y -ellas- serán mi salario.
33. Y así en el tiempo venidero mi justicia hablará por mí: cuando mi salario llegue delante de tu rostro, cualquiera que no sea pintada ni manchada entre las cabras, o café entre las ovejas, que esa sea contada -como- robada – por mí, si está- conmigo.
34. Y Labán -le- dijo, Mira que quisiera que ocurriera de acuerdo a tu palabra.
35. Y ese día retiró los machos cabríos rayados y manchados, y todas las cabras pintadas y manchadas, y toda aquella que tuviera algo de blanco en ella, además de todas las ovejas cafés, y -las- puso en manos de sus hijos.
36. Y estableció -una distancia de- un viaje de tres días entre él y Jacob, y Jacob alimentaba el resto de los rebaños de Labán.
37. + Y Jacob se tomó varas de álamo verde, de avellano y de árbol de castaño, y peló rayas blancas en ellas, e hizo que el blanco que -estaba- en las varas apareciera.
38. Y colocaba las varas que había pelado delante de los rebaños en los canalones de los abrevaderos -para- cuando los rebaños vinieran a beber, para que así concibieran cuando llegaran a beber.
39. Y los rebaños concebían delante de las varas, y producían ganado rayado, pintado y manchado.
40. Y Jacob separaba los corderos, y colocaba la cara de los rebaños hacia los rayados y -esto lo hacía con- todos los marrones del rebaño de Labán; y a sus propios rebaños los separaba, y no los colocaba -en dirección- hacia el ganado de Labán.
41. Y sucedía que cuando el ganado más fuerte concebía, Jacob ponía las varas delante de los ojos del ganado en los canalones, para que pudieran concebir entre las varas.
42. Pero cuando el ganado era débil, él no los entraba, -y- así los más débiles fueron -los- de Labán, y los más fuertes -los- de Jacob.
43. Y el hombre prosperaba de manera extrema, y tenía mucho ganado, criadas, criados, camellos y asnos.

Génesis 29

1. Jacob entonces continuó su viaje, y entró a la tierra de las gentes del oriente.
2. Y miró y vio un pozo en el campo, y he aquí que -yacían- tres rebaños de ovejas descansando al lado de este, pues de ese pozo se daba de beber a los rebaños, y había una gran piedra sobre la boca del pozo.
3. Y allí se reunían todos los rebaños, rodaban la piedra de la boca del pozo para darle agua a las ovejas, y -luego- ponían la piedra de nuevo en su lugar sobre la boca del pozo.
4. Y Jacob les dijo, Hermanos míos, ¿de dónde sois? Y ellos -le- dijeron, De Harán.
5. Y él les dijo, ¿Conocéis a Labán el hijo de Nacor? Y ellos -le- dijeron, -Lo- conocemos.
6. Él les dijo, ¿-Está- bien? Y -le- dijeron, Está bien, y mira que Raquel su hija viene con las ovejas.
7. Y -les- dijo, Mirad que aún -es- pleno día, y tampoco -es- hora para ir a reunir y aunar el ganado: abrevad las ovejas e id a apacentar-las-.
8. Y ellos dijeron, No podemos -hasta- que se reúnan todos los rebaños y rueden la piedra de la boca del pozo, entonces abrevaremos a las ovejas.
9. + Y mientras él aún hablaba con ellos, Raquel vino con las ovejas de su padre, pues ella las cuidaba.
10. Y sucedió que cuando Jacob vio a Raquel la hija de Labán, el hermano de su madre y a las ovejas de Labán, el hermano de su madre, Jacob se acercó y rodó la piedra de la boca del pozo y abrevó el rebaño de Labán, el hermano de su madre.
11. Y Jacob besó a Raquel, levantó su voz y lloró.
12. Y Jacob le dijo a Raquel que él -era- hermano de su padre, hijo de Rebeca: y ella corrió a decirle a su padre.
13. Y sucedió que cuando Labán oyó las buenas nuevas de Jacob el hijo de su hermana corrió a encontrarlo, lo abrazó, lo besó y lo trajo hasta su casa. Y él le contó a Labán todas estas cosas.
14. Y Labán le dijo, Por seguro que -eres- hueso mío y carne mía. Y permaneció con él por espacio de un mes.
15. + Y Labán le dijo a Jacob, Como -eres- hermano mío, ¿vas por tanto a servirme a cambio de nada? Dime, ¿cuál -será- tu salario?
16. Y Labán tenía dos hijas, el nombre de la mayor -era- Lea, y el nombre de la menor, Raquel.
17. Lea era tierna a la vista, pero Raquel era bella y bien favorecida.
18. Y Jacob amó a Raquel, y dijo, te serviré siete años a cambio de Raquel tu hija menor.
19. Y Labán dijo, Mejor dártela a tí que tener que dársela a otro hombre: Quédate conmigo.
20. Y Jacob -le- sirvió siete años a cambio de Raquel, y le parecieron -sólo- unos días por el amor que le tenía.
21. + Y Jacob -le- dijo a Labán, Dame mi esposa, pues se han cumplido mis días, para poder allegarme a ella.
22. Y Labán reunió a todos los hombres del lugar e hizo una fiesta.
23. Y sucedió que en la noche él tomó a Lea su hija y se la trajo a él, y él se allegó a ella.
24. Y Labán le dió a su hija Lea, Zilpa su doncella, -por- sierva.
25. Y aconteció que he aquí en la mañana esta -era- Lea: y le dijo a Labán, ¿Qué -fue- lo que me hiciste? No te serví a cambio de Raquel? Por qué entonces me engañaste?
26. Y Labán dijo, En nuestro país no se debe hacer así de dar la más joven antes de la primogénita.
27. Cumple su semana, y te daremos también esta por servirme todavía otros siete años.
28. Y así hizo Jacob, cumplió la semana de ella, y él también le dio a Raquel su hija por esposa.
29. Y Labán le dio su sirvienta Bilha a Raquel su hija, para que fuera su criada.
30. Y él también se allegó a Raquel, y además amó a Raquel, más que a Lea, y le sirvió a él aún otros siete años.
31. + Y cuando el SEÑOR vio que Lea -era- detestada, abrió su vientre; sin embargo Raquel -era- estéril.
32. Y Lea concibió, y dio a luz un hijo, y ella llamó su nombre Rubén, pues dijo, Ciertamente el SEÑOR ha mirado mi aflicción; ahora mi esposo me amará.
33. Y ella concibió de nuevo, y dio a luz a un hijo; y dijo, Porque el SEÑOR escuchó que yo -era- detestada, me ha dado por ello este también: y llamó su nombre Simeón.
34. Y concibió de nuevo, y dio a luz a un hijo, y dijo, Esta vez mi esposo se acercará a mí, ya que le he dado tres hijos: por eso su nombre fue Leví.
35. Y concibió de nuevo, y dio a luz a un hijo, y dijo, Ahora alabaré al SEÑOR: por eso llamó su nombre Judá; y dejó de dar a luz.

Génesis 28

1. E Isaac llamó a Jacob, y lo bendijo, y le encargó diciendo, No tomarás esposa de las hijas de Canaán.
2. Levántate, ve a Padan-aram, a la casa de Betuel el padre de tu madre, y tómate una esposa de allí, de las hijas de Labán el hermano de tu madre.
3. Y que Dios Todopoderoso te bendiga, te haga productivo y te multiplique, para que puedas ser una multitud de gente.
4. Te dé la bendición de Abraham a ti y a tu simiente contigo para que puedas heredar la tierra de la cual eres extranjero, la cual Dios -le- dió a Abraham.
5. E Isaac despidió a Jacob, y él se fue a Padan-aram donde Labán, hijo de Betuel el Sirio, el hermano de Rebeca la madre de Jacob y de Esaú.
6. + Cuando Esaú vió que Isaac había bendecido a Jacob y lo había enviado a Padan-aram para que tomase esposa de allí, y que mientras lo bendecía le había encargado diciendo, No tomarás esposa de las hijas de Canaán,
7. Y que Jacob -había- obedecido a su padre y a su madre, y se -había- ido a Padan-aram,
8. Y Esaú al ver que las hijas de Canaán no le complacían a Isaac su padre,
9. Fue entonces Esaú a donde Ismael, y tomó -añadiendo- a las esposas que tenía, a Mahalat hija de Ismael el hijo de Abraham, -y- hermana de Nebaiot, como esposa suya.
10. + Y Jacob salió de Beerseba y fue hasta Harán.
11. Y posó en cierto lugar y se quedó allí toda la noche porque el sol -ya- se había puesto. Tomó de las piedras de ese lugar, -las- puso -como- almohadas, y allí se acostó a dormir.
12. Y soñó, y he aquí una escalera puesta sobre la tierra, y la parte superior de ella alcanzaba al cielo, y he aquí a los ángeles de Dios ascendiendo y descendiendo sobre ella.
13. Y, he aquí que encima de ella permanecía el SEÑOR, y decía, Yo -soy- el SEÑOR Dios de Abraham tu padre, y el Dios de Isaac; la tierra donde yaces, a ti te la daré, y -también- a tu simiente;
14. Y tu simiente será como el polvo de la tierra, y te esparcirás al oeste, al este, al norte y al sur, y en ti y en tu simiente serán bendecidas todas las familias de la tierra.
15. Y, he aquí que Yo -estoy- contigo, y te guardaré en todos los -lugares- donde vayas, y a esta tierra te traeré de nuevo; pues no te dejaré hasta haber hecho lo que te he hablado.
16. + Y Jacob se despertó de su sueño y dijo, Por seguro que el SEÑOR está en este lugar, y no -lo- sabía.
17. Y tuvo miedo, y dijo, ¡Qué pavoroso -es- este lugar! Esta no es sino la casa de Dios, y este el portón del cielo.
18. Y Jacob se levantó temprano en la mañana, tomó la piedra que había puesto -como- almohada, y la organizó -como- un pilar, derramando aceite encima de ella.
19. Y llamó el nombre de ese lugar Bet-el: pero esa ciudad al principio la llamaban Luz.
20. Y Jacob hizo un juramento, diciendo, Si Dios va a estar conmigo, y me va a guardar en este camino en el que ando, dándome pan para comer y atavíos para ponerme
21. Para poder llegar de nuevo a la casa de mi padre en paz, entonces el SEÑOR será mi Dios,
22. Y esta piedra que he puesto -como- un pilar, -la- casa de Dios será, y de todo lo que me des con certeza la décima parte te daré.

Génesis 27

1. Y sucedió que cuando Isaac era viejo y su vista tan tenue que no podía ver, llamó a Esaú su hijo mayor, y le dijo, Hijo mío; y él le dijo, Mira que -aquí estoy-.
2. Y -le- dijo, He aquí que ahora soy viejo, y no conozco el día de mi muerte.
3. Ahora por tanto te ruego que tomes tus armas, tu aljaba y tu arco, salgas al campo y me consigas -algún- venado.
4. Me hagas una comida sabrosa de las que me fascinan, y me -la- traigas para comer, y así mi alma pueda bendecirte antes de morir.
5. Y Rebeca escuchó cuando Isaac le hablaba a Esaú su hijo. Y Esaú fue al campo a cazar -un- venado -y- a traerlo.
6. Y Rebeca le habló a Jacob su hijo, diciendo, Mira que escuché a tu padre hablarle a Esaú tu hermano, diciendo,
7. Tráeme un venado y hazme una comida sabrosa para comerla, y bendecirte delante del SEÑOR antes de mi muerte.
8. Ahora por tanto, hijo mío, obedece mi voz de acuerdo a lo que te mande.
9. Ve ahora -mismo- hasta donde el rebaño, y consígueme de allí dos buenos cabritos, y haré una comida sabrosa para tu padre de las que le fascinan.
10. Y se -la- llevarás a tu padre para que la coma y te pueda bendecir antes de su muerte.
11. Y Jacob -le- dijo a Rebeca su madre, He aquí que Esaú mi hermano es un hombre peludo, y yo un hombre de piel suave.
12. Mi padre por ventura me sentirá, apareceré ante él como un engañador, y traeré una maldición sobre mí en vez de una bendición.
13. Y su madre le dijo, Sobre mí -sea- tu maldición hijo mío. Sólo obedece mi voz y vé y me -los- traes.
14. Y él fue, -los- consiguió y – se los- trajo a su madre; y su madre hizo una apetitosa comida de las que le fascinaban a su padre.
15. Y Rebeca tomó buenas vestimentas de su hijo mayor Esaú que -estaban- con ella en su casa y se las puso a Jacob su hijo menor:
16. Y colocó las pieles de los cabritos sobre sus manos y sobre lo liso de su cuello:
17. Puso la carne y el pan sabroso que había preparado en la mano de su hijo Jacob.
18. + Y él vino hasta donde su padre, y dijo, Padre mío. Y él dijo, Aquí -estoy-; – ¿Quién -eres- tú hijo mío?
19. Y Jacob le dijo a su padre, -Soy- Esaú tu primogénito; Hice de acuerdo a lo que me instruiste; levántate, te ruego siéntate y come de mi venado para que tu alma me bendiga.
20. E Isaac le dijo a su hijo, Cómo -fue- que lo encontraste tan rápido hijo mío? Y él dijo, Porque el SEÑOR tu Dios me -lo- trajo a mí.
21. E Isaac le dijo a Jacob, Acércate te lo ruego, para que pueda sentirte, hijo mío si -eres- mi verdadero hijo Esaú o no.
22. Y Jacob se acercó a Isaac su padre, él lo sintió, y dijo, La voz es la voz de Jacob, pero las manos -son- las manos de Esaú.
23. Y él no lo discernió, porque sus manos eran peludas como las manos de su hermano Esaú: de manera que lo bendijo.
24. Y dijo, ¿Eres mi mismo hijo Esaú? Y él dijo, Lo soy.
25. Y dijo. Acércame-lo-, y comeré del venado de mi hijo, para que mi alma te pueda bendecir. Y se -lo- acercó, y comió, y le trajo vino y bebió.
26. Y su padre Isaac le dijo. Acércate ahora, y bésame hijo mío.
27. Y él se acercó, y lo besó: y él olió el olor de su vestido, y lo bendijo a él diciendo, Ves, el olor de mi hijo -es- como el olor de un campo al que el SEÑOR ha bendecido.
28. Por eso Dios te da el rocío del cielo, la abundancia de la tierra, y redundancia de grano y vino.
29. Que la gente te sirva y las naciones se inclinen ante ti. Sé señor sobre tus hermanos, y que los hijos de tu madre se inclinen ante ti: maldito todo el que te maldiga, y bendito el que te bendiga.
30. + Y sucedió que tan pronto como Isaac había terminado de bendecir a Jacob, y Jacob acababa de salir de la presencia de Isaac su padre, que Esaú su hermano llegó de su cacería.
31. Y también había hecho una comida sabrosa, -la- trajo a su padre, y le dijo, Que se levante mi padre, y coma del venado de su hijo, para que tu alma me pueda bendecir.
32. E Isaac su padre le dijo, ¿Quién -eres-? Y él le dijo, -Soy- tu hijo, tu primogénito Esaú.
33. E Isaac tembló sobremanera y dijo, ¿Quién? ¿Dónde -está- el que tomó venado y me -lo- trajo, y comí todo antes de que vinieras y lo bendije? Sí, el será bendecido.
34. Y cuando Esaú oyó las palabras de su padre, clamó con un grito grande y en extremo amargo, y dijo a su padre, Bendíceme también a mí Oh padre mío.
35. Y él dijo, Tu hermano vino con sutileza y se ha llevado tu bendición.
36. Y él dijo, ¿No se le ha llamado con razón Jacob? Porque me ha suplantado estas dos veces: se llevó mi derecho de nacimiento y he aquí que ahora se ha llevado mi bendición. Y -le- dijo, ¿No has reservado una bendición para mí?
37. E Isaac respondió y -le- dijo a Esaú, Mira que lo he hecho señor tuyo, y a todos sus hermanos se los he dado por sirvientes; y con maiz y vino lo he sustentado: ¿Y qué te haré ahora a ti hijo mío?
38. Y Esaú -le- dijo a su padre, ¿No tienes sino una bendición padre mío? Bendíceme a mí también, oh padre mío. Y Esaú alzó su voz y lloró.
39. E Isaac su padre respondió y le dijo, He aquí que tu morada será la ricura de la tierra, y -la- del rocío de arriba del cielo.
40. Y por tu espada vivirás, y servirás a tu hermano; y sucederá cuando tengas el dominio, que su yugo quebrarás de tu cuello.
41. + Y Esaú odió a Jacob debido a la bendición con la que su padre lo -había- bendecido, y Esaú dijo en su corazón, Los días de lamento por mi padre están cerca; luego mataré a mi hermano Jacob.
42. Y estas palabras de Esaú su hijo mayor le fueron dichas a Rebeca, y ella mandó a llamar a Jacob su hijo menor, y le dijo, He aquí que tu hermano Esaú en lo tocante a ti, se consuela a sí mismo -proponiéndose- matarte.
43. Ahora por tanto, hijo mío, obedece mi voz; levántate, huye a donde Labán mi hermano, a Harán,
44. Y demórate con él unos días hasta que la furia de tu hermano se disipe.
45. Hasta que la furia de tu hermano hacia ti se disipe, y se olvide de lo que le has hecho. Entonces de allá mandaré a recogerte; ¿Por qué debo perder a ambos también en un día?
46. Y Rebeca -le- dijo a Isaac, Estoy agotada de la vida por las hijas de Het: si Jacob toma esposa de las hijas de Het como estas de las hijas de la tierra, ¿qué bien me hará la vida?

Génesis 26

1. Y Hubo una hambruna en la tierra, como la primera hambruna que hubo en los días de Abraham. E Isaac fue donde Abimelec, -el- rey de los Filisteos en Gerar.
2. Y el Señor se le apareció, y -le- dijo, No bajes hasta Egipto; habita en la tierra que te voy a decir.
3. Reside en esta tierra, y Yo estaré contigo y te bendeciré, pues a ti y a tu simiente daré todos estos países, y cumpliré el juramento que le hice a Abraham tu padre.
4. Y haré que tu simiente se multiplique como las estrellas del cielo, y le daré a tu simiente todos estos países, y en tu simiente serán bendecidas todas las naciones de la tierra.
5. Debido a eso Abraham obedeció mi voz y guardó mi encargo, mis mandamientos, mis estatutos y mis leyes.
6. + E Isaac habitó en Gerar.
7. Y los hombres del lugar -le- preguntaban por su esposa, y él decía, Es mi hermana: pues temía decir, Es mi esposa, no sea, -decía él, que- los hombres del lugar me vayan a matar por Rebeca, ya que ella -era- hermosa a la vista.
8. Y sucedió que cuando él había estado allí por un buen tiempo, Abimelec -el- rey de los Filisteos miró por la ventana, y vio y he aquí que Isaac estaba jugando con Rebeca su esposa.
9. Y Abimelec llamó a Isaac, y -le- dijo, He aquí que ella por seguro -es- tu esposa: ¿y cómo dijiste, Es mi hermana? E Isaac le dijo, Porque -me- dije, No vaya a ser que muera a causa de ella.
10. Y Abimelec -le- dijo, ¿Qué -es- lo que nos has hecho? Uno del pueblo podría ligeramente haberse acostado con tu esposa, y tú pudiste haber traido culpa sobre nosotros.
11. Y Abimelec le encargó a todo -su- pueblo diciendo: El que toque a este hombre o a su esposa por seguro que sufrirá la muerte.
12. Entonces Isaac sembró en esa tierra, y recibió en ese mismo año el ciento por ciento, y el Señor lo bendijo.
13. Y el hombre prosperó, progresó y creció hasta volverse muy importante.
14. Pues tenía posesión de rebaños y posesión de ganados y un gran grupo de sirvientes, y los Filisteos lo envidiaban.
15. Pues todos los pozos que los sirvientes de su padre habían cavado en los días de Abraham su padre, los Filisteos los habían secado y llenado con tierra.
16. Y Abimelec le dijo a Isaac, Vete de nosotros, pues eres mucho más poderoso que nosotros.
17. + E Isaac partió de allí, y levantó su tienda en el valle de Gerar, y habitó allí.
18. E Isaac excavó de nuevo los pozos de agua que ellos habían cavado en los días de Abraham su padre, ya que los Filisteos los habían secado tras la muerte de Abraham, y los llamó con los nombres que su padre los había llamado.
19. Y los sirvientes de Isaac excavaron en el valle, y encontraron allí un pozo que manaba agua.
20. Y los vaqueros de Gerar contendían con los vaqueros de Isaac, diciendo, El agua -es- nuestra. Y él llamó el nombre del pozo Esek, ya que contendían con él.
21. Y excavaron otro pozo, y contendían también por ese, y llamó el nombre de este Sitna.
22. Y se retiró de allí y excavó otro pozo, y por ese no contendieron y llamó el nombre de este Rehobot, y dijo, Pues ahora el Señor ha hecho campo para nosotros, y seremos productivos en la tierra.
23. Y subió de allí a Beerseba.
24. Y el SEÑOR se le apareció esa misma noche, y -le- dijo, Yo -soy- el Dios de Abraham tu padre: no temas, pues Yo -estoy- contigo y te bendeciré y multiplicaré tu simiente por amor a mi siervo Abraham.
25. Y él construyó un altar allí, e invocó el nombre del SEÑOR, y allí levantó su tienda: y allí los sirvientes de Isaac excavaron un pozo.
26. + Entonces Abimelec fue hasta donde él desde Gerar, junto con Ahuzat uno de sus amigos, y Ficol el capitán en jefe de su ejército.
27. E Isaac le dijo a ellos, ¿De dónde acá venís vosotros a mí, viendo que me odiáis, y que me habéis enviado lejos?
28. Y ellos dijeron, Vimos ciertamente que el SEÑOR estaba contigo, y dijimos, que haya ahora un juramento entre nosotros, -esto es- entre nosotros y tú, y hagamos un convenio contigo.
29. Que tú no nos harás daño, -así- como nosotros no te hemos tocado y no te hemos hecho sino cosas buenas, habiéndote enviado lejos en paz. -Eres- ahora el bendecido del SEÑOR.
30. Y él les hizo un festín, y comieron y bebieron.
31. Y se levantaron temprano en la mañana, y se juraron entre sí, e Isaac los despidió, y ellos se separaron de él en paz.
32. Y sucedió que ese mismo día los sirvientes de Isaac vinieron y le contaron acerca del pozo que habían excavado, y le dijeron, Encontramos agua.
33. Y él lo llamó Seba. Por ello el nombre de la ciudad es Beerseba hasta este día.
34. + Y Esaú tenía cuarenta años cuando tomó como esposa a Judit, la hija de Beeri el Heteo, y a Basemat la hija de Elón el Heteo.
35. Las cuales fueron una pena mental para Isaac y Rebeca.